EL DIPUTADO DE LOS VERDES SUPEDITA SU ACUERDO CON EL PSOE A UN COMPROMISO ANTES DEL VERANO DE CIERRE DE NUCLEARES.
Francisco Garrido, el diputado de Los Verdes adscrito al Grupo Socialista en el Congreso, supeditó hoy la continuidad de su acuerdo con el PSOE a que antes del verano la Cámara Baja adopte un compromiso claro de cierre de las centrales nucleares. Según explicó a Europa Press el propio Garrido, este es el meollo del pacto de legislatura suscrito entre ambas formaciones.
"Nosotros nos sentimos muy contentos y muy satisfechos. Estamos obteniendo un nivel de colaboración alto y no aspiramos para nada a que este acuerdo se resquebraje, a lo que aspiramos es a que se cumpla con medidas políticas", avisó. La ruptura de ese acuerdo implicaría el paso de Garrido al Grupo Mixto, una cuestión que, según dijo, "de momento no está en la agenda".
En este sentido, el diputado verde mostró su confianza en que se puedan resolver las discrepancias que su formación tiene con el PSOE en algunos asuntos, pero dejó claro que la solución no será fácil si los socialistas mantienen la misma actitud con la que han reaccionado al anuncio de Los Verdes de votar en contra del trasvase del Júcar-Vinalopó.
Ante esta postura, los socialistas han optado por excluir a Garrido de la votación del Plan Hidrológico Nacional (PHN), que tuvo lugar esta mañana en la Comisión de Medio Ambiente. El diputado ya ha advertido de que si el Gobierno mantiene tal cual su propuesta de trasvase, apoyará la enmienda que reclama su supresión cuando llegue al Pleno.
Pero el escollo fundamental en las relaciones entre el PSOE y Los Verdes es el relativo a la energía nuclear que, en opinión de Garrido, esconde "un conflicto en ciernes". De momento esta cuestión puede acarrear su abstención en la votación que tendrá lugar mañana en el Pleno para convalidar el Decreto de reformas urgentes para el impulso de la productividad y la mejora de la contratación pública, habida cuenta de que "favorece el tratamiento de residuos nucleares".
CERRAR GAROÑA Y REFORMAR EL CSN
Garrido denuncia que esta medida, introducida por el Ministerio de Industria, contradice el compromiso del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de avanzar en la desaparición de las centrales.
Precisamente, Garrido planteó hace casi dos meses una proposición no de ley al Grupo Socialista, que aún no ha sido registrada, que tiene como objetivo arrancar al Gobierno el compromiso de cerrar la central nuclear de Garoña (Burgos), aprobar en esta legislatura de un plan de cierre gradual de las nucleares, pero con un calendario concreto, y reformar el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), que Garrido considera un "auténtico lobby de las empresas privadas" que tiene que ser "transparente y más democrático".
Garrido quiere que esta proposición no de ley, que en principio el PSOE no se ha negado a tramitar, se apruebe antes del verano y subraya que su contenido constituye el "ABC" de su acuerdo con los socialistas. "Tiene un contenido político absolutamente fundamental. Nosotros no podemos pasar en este periodo de sesiones sin que haya un compromiso parlamentario", sentenció.
Por último, el diputado verde avanza que otro punto de conflicto con el PSOE puede aparecer cuando el Plan de Infraestructuras del Gobierno se debata en el Congreso, porque, según su redacción inicial "hace imposible el cumplimiento del Protocolo de Kyoto".
FUENTE: EUROPA PRESS 07-04-2005
"Nosotros nos sentimos muy contentos y muy satisfechos. Estamos obteniendo un nivel de colaboración alto y no aspiramos para nada a que este acuerdo se resquebraje, a lo que aspiramos es a que se cumpla con medidas políticas", avisó. La ruptura de ese acuerdo implicaría el paso de Garrido al Grupo Mixto, una cuestión que, según dijo, "de momento no está en la agenda".
En este sentido, el diputado verde mostró su confianza en que se puedan resolver las discrepancias que su formación tiene con el PSOE en algunos asuntos, pero dejó claro que la solución no será fácil si los socialistas mantienen la misma actitud con la que han reaccionado al anuncio de Los Verdes de votar en contra del trasvase del Júcar-Vinalopó.
Ante esta postura, los socialistas han optado por excluir a Garrido de la votación del Plan Hidrológico Nacional (PHN), que tuvo lugar esta mañana en la Comisión de Medio Ambiente. El diputado ya ha advertido de que si el Gobierno mantiene tal cual su propuesta de trasvase, apoyará la enmienda que reclama su supresión cuando llegue al Pleno.
Pero el escollo fundamental en las relaciones entre el PSOE y Los Verdes es el relativo a la energía nuclear que, en opinión de Garrido, esconde "un conflicto en ciernes". De momento esta cuestión puede acarrear su abstención en la votación que tendrá lugar mañana en el Pleno para convalidar el Decreto de reformas urgentes para el impulso de la productividad y la mejora de la contratación pública, habida cuenta de que "favorece el tratamiento de residuos nucleares".
CERRAR GAROÑA Y REFORMAR EL CSN
Garrido denuncia que esta medida, introducida por el Ministerio de Industria, contradice el compromiso del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de avanzar en la desaparición de las centrales.
Precisamente, Garrido planteó hace casi dos meses una proposición no de ley al Grupo Socialista, que aún no ha sido registrada, que tiene como objetivo arrancar al Gobierno el compromiso de cerrar la central nuclear de Garoña (Burgos), aprobar en esta legislatura de un plan de cierre gradual de las nucleares, pero con un calendario concreto, y reformar el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), que Garrido considera un "auténtico lobby de las empresas privadas" que tiene que ser "transparente y más democrático".
Garrido quiere que esta proposición no de ley, que en principio el PSOE no se ha negado a tramitar, se apruebe antes del verano y subraya que su contenido constituye el "ABC" de su acuerdo con los socialistas. "Tiene un contenido político absolutamente fundamental. Nosotros no podemos pasar en este periodo de sesiones sin que haya un compromiso parlamentario", sentenció.
Por último, el diputado verde avanza que otro punto de conflicto con el PSOE puede aparecer cuando el Plan de Infraestructuras del Gobierno se debata en el Congreso, porque, según su redacción inicial "hace imposible el cumplimiento del Protocolo de Kyoto".
FUENTE: EUROPA PRESS 07-04-2005
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