LA ONCE BUSCA FAMILIAS PARA ADOPTAR CACHORROS DE FUTUROS PERROS-GUÍA
RESIDIR EN LA COMUNIDAD DE MADRID ES UN REQUISITO
La Fundación ONCE del Perro-Guía está buscando familias que deseen acoger cachorros de futuros perros-guía. Estas familias recibirán de forma gratuita información sobre los cuidados que necesitan estos animales, así como asistencia veterinaria y todo aquello que el perro precise.
Las familias que deseen adoptar estos cachorros deben residir en la Comunidad de Madrid o provincias limítrofes. La correcta instrucción del cachorro constituye una etapa de suma importancia, según ha informado la fundación.
Cuando el cachorro cumpla un año, plazo en el que concluye la etapa de socialización, ingresará en la Escuela en la que se entrenará para ser "los ojos" de una persona ciega. La familia que lo ha tenido durante este tiempo puede, de forma inmediata, acoger un nuevo cachorro.
La raza más idónea para realizar las labores de perro-guía es la Labrador, aunque en la actualidad también existen otras razas óptimas para esta tarea como son el Pastor Alemán, el Golden Retriever y el cruce de Labrador y Golden Retriever.
Estos compañeros de las personas ciegas son un servicio social que la ONCE facilita a sus afiliados. Todo este proceso de entrenamiento de cada perro, desde el nacimiento hasta que llega a las manos de un usuario, cuesta unos 30.000 euros (alrededor de cinco millones de pesetas).
La Fundación ONCE del Perro-Guía está buscando familias que deseen acoger cachorros de futuros perros-guía. Estas familias recibirán de forma gratuita información sobre los cuidados que necesitan estos animales, así como asistencia veterinaria y todo aquello que el perro precise.
Las familias que deseen adoptar estos cachorros deben residir en la Comunidad de Madrid o provincias limítrofes. La correcta instrucción del cachorro constituye una etapa de suma importancia, según ha informado la fundación.
Cuando el cachorro cumpla un año, plazo en el que concluye la etapa de socialización, ingresará en la Escuela en la que se entrenará para ser "los ojos" de una persona ciega. La familia que lo ha tenido durante este tiempo puede, de forma inmediata, acoger un nuevo cachorro.
La raza más idónea para realizar las labores de perro-guía es la Labrador, aunque en la actualidad también existen otras razas óptimas para esta tarea como son el Pastor Alemán, el Golden Retriever y el cruce de Labrador y Golden Retriever.
Estos compañeros de las personas ciegas son un servicio social que la ONCE facilita a sus afiliados. Todo este proceso de entrenamiento de cada perro, desde el nacimiento hasta que llega a las manos de un usuario, cuesta unos 30.000 euros (alrededor de cinco millones de pesetas).
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jesus novillo garcia -